MUERTE
El humo denso que camina cerca de ti,
El ruido que no va, las sombras de ayer,
El solo de una canción que escucho sin ti.
La imagen de las luciérnagas que no pude ver.
El silencio que canta tu piel,
Los años de aquella infancia,
La traición que nunca confesé,
El miedo de las gotas de lluvia.
La nostalgia de otoño; sus ojos,
La mentira que siempre creíste.
El exilio de mi cama, el antiguo amor.
Los días que nunca despertaron,
El sueño de María, los niños tímidos,
El poema que nunca encontraron,
La danza sin pies, sin manos, sin ojos.
La vida que no cambia ni anima,
Las tarde con laberintos, con años perdidos,
La esperanza de la muerte que no viene,
Que no ayuda; la muerte que no me pudre,
Que no me salva, que no baila en mi tumba.
La muerte que me espera es aquella la que
Marca mi tic tac, la que no ahoga, la esperanza
De cada mañana. Espero que hoy no te equivoques;
Quiero que sepas que nunca te cierro la puerta,
Que no te he abandonado, que te llamo como
Se llama al amor perdido, que mi voz te lame,
Te espera, te desea; te viste, te mira, te anhela.
Y soy tuya como lo fui de él, soy de tu calor
De tu aliento, de tus sueños, de tus dedos.
No tengo miedo, no quiero regresar; encuéntrame.
Cierra mis ojos, acaricia cada instante,
Que no quede zozobra de mí, de ti, de nosotros.
Que no le dejes al temor todo lo que dejo y soy.
Robertha Mayer
El ruido que no va, las sombras de ayer,
El solo de una canción que escucho sin ti.
La imagen de las luciérnagas que no pude ver.
El silencio que canta tu piel,
Los años de aquella infancia,
La traición que nunca confesé,
El miedo de las gotas de lluvia.
La nostalgia de otoño; sus ojos,
La mentira que siempre creíste.
El exilio de mi cama, el antiguo amor.
Los días que nunca despertaron,
El sueño de María, los niños tímidos,
El poema que nunca encontraron,
La danza sin pies, sin manos, sin ojos.
La vida que no cambia ni anima,
Las tarde con laberintos, con años perdidos,
La esperanza de la muerte que no viene,
Que no ayuda; la muerte que no me pudre,
Que no me salva, que no baila en mi tumba.
La muerte que me espera es aquella la que
Marca mi tic tac, la que no ahoga, la esperanza
De cada mañana. Espero que hoy no te equivoques;
Quiero que sepas que nunca te cierro la puerta,
Que no te he abandonado, que te llamo como
Se llama al amor perdido, que mi voz te lame,
Te espera, te desea; te viste, te mira, te anhela.
Y soy tuya como lo fui de él, soy de tu calor
De tu aliento, de tus sueños, de tus dedos.
No tengo miedo, no quiero regresar; encuéntrame.
Cierra mis ojos, acaricia cada instante,
Que no quede zozobra de mí, de ti, de nosotros.
Que no le dejes al temor todo lo que dejo y soy.
Robertha Mayer
4 comentarios
mentally insane -
mentally insane -
Lirva -
saludos
mentally insane -
Saludos.